El amor es una de las formas más sublimes del auto abandono. En el trance amoroso la identificación con lo amado es intensa y compleja. Los enamorados pierden temporalmente una noción ontológica fundamental: saber quiénes son. El ser que ama lucha para reconocerse en la nueva condición. Las nuevas reglas del juego. Soy a través de ti. Soy tú y tú eres yo. Esta concepción de dependencia vital entre los seres constituye el origen central del amor. Se funda en el supuesto de que uno es capaz de amar porque se ama a sí mismo. El acuerdo es mutuo y por ende es puro.

En lengua inglesa uno no se enamora; uno “cae en el amor”. Así como se cae en un abismo inesperado, se ama sin control. En la caída el tiempo se detiene, se diluye la noción que uno tiene de sí mismo. El enamoramiento es la abstracción del ser. Se gesta un cambio paradigmático en el que uno se admira a sí mismo en la fortaleza y la fragilidad del otro. El amor es trágico porque es igualmente triunfo y derrota. Lo que se precipita, alcanza un fondo. El final del amor es ruptura interna, el corazón quebrado llora y el amante ya no vuelve a ser lo que era; ahora también es lo que ha perdido. El amor puede devenir en odio. Se odia lo que no se puede amar, lo inalcanzable, lo anhelado, lo inentendible, lo ignorado.

La obra “Love and Lack of Love” del artista Héctor Herrera traza un puente entre el origen físico y el emocional de la experiencia amorosa. Esta representación se lleva a cabo construyendo, a través de módulos (dípticos, trípticos y polípticos), fragmentos narrativos que presentan diversas etapas naturales del proceso amoroso: desde su origen intrínseco de la biología corporal, hasta la complejidad racional y emocional de las relaciones sentimentales.

Cada escena ha sido creada en colaboración con fotógrafos de diferentes partes del mundo. Estos artistas fueron invitados a participar en “Love and Lack of Love”. Sus imágenes han sido transformadas en pinturas y dispuestas por Héctor Herrera para crear los micro relatos que aquí se presentan por primera vez.